Josep Carner
Lluís Cànovas Martí  /  2002

Poeta y político en lengua catalana (Barcelona, 1884-Bruselas, 1970), figura emblemática del noucentisme, movimiento cultural al servicio del proyecto nacional de la burguesía catalana que tuvo su máximo ideólogo en E. D'Ors y, en el orden lingüístico, propició la normalización de un catalán literario y estandarizado. Carner es señalado por la crítica, por su contención y exigencia en el uso de la lengua y el estilo, como uno de los mejores escritores catalanes de todos los tiempos. Publicó precozmente a los 12 años sus primeros versos, muy influenciados por J. Verdaguer y los autores modernistas, con quienes pronto, sin embargo, pasaría a polemizar. Con 15 años ganó un accésit en los Juegos Florales. En 1902, tras cursar derecho y filosofía y letras, se ganó la protección de Enric Prat de la Riba, presidente de la Mancomunitat , el incipiente y efímero órgano de autogobierno catalán, y entró como colaborador en La Veu de Catalunya, donde se distinguió como un vivo polemista al servicio de la conservadora Lliga Regionalista. Su primer poemario, Llibre dels poetes (1904), refleja aún la influencia modernista, pero los siguientes, Primer llibre de sonets (1906) y sobre todo Els fruits saborosos (1907), marcan ya plenamente el comienzo del noucentisme y sus cánones literarios: los 18 poemas de Els fruits... relacionan las etapas de la vida de la mujer con diversos frutos, cuyas medidas, colores y texturas ejemplifican la condición humana, a través de temas triviales -como el de una ama de casa que bebe limonada- que el autor estiliza, entre otros recursos, mediante los nombres grecolatinos de los protagonistas, y construyendo un retablo ideal y urbano que rememora, en tonos suaves, irónicos y optimistas, el sueño clasicista de la mediterraneidad. En 1911 fue secretario de la sección de filología del Institut d'Estudis Catalans, en donde colaboraría con Pompeu Fabra en la redacción de las Normas Ortográficas del catalán. Entre las restantes obras del período, destaca Auques i ventalls (1918), visión irónica de los pueblos de veraneo que es un ejemplo paradigmático del modelo de «civilidad» propuesto por los noucentistes. Ingresó en la carrera diplomática en 1921, recibiendo destinos consulares en Europa y Latinoamérica, y evolucionando hacia el simbolismo: El cor quiet (1925) ha sido señalada como la mejor de sus obras. Al término de la guerra civil se exilió a México y, en 1945, a Bélgica, donde hasta 1947 fue miembro del gobierno catalán en el exilio, siendo lo más destacable de su producción del período el poema épico-lírico Nabí (1941).

Lluís Cànovas Martí, «Josep Carner»
Escrit pel Diccionario de literatura universal, Grupo Editorial Océano, Barcelona, 2004